La idea de dividir a los hombres en categorías de «alfa,» «beta,» y «gamma» se origina en la llamada «teoría de la jerarquía de los hombres» o «teoría de la masculinidad» que ha sido popularizada en la cultura popular, pero no tiene una base científica sólida. Estos términos son utilizados de manera subjetiva y no existe una definición universalmente aceptada de lo que significa ser un «hombre alfa,» «hombre beta,» o «hombre gama.» Sin embargo, a continuación, te proporcionaré una descripción general de cómo a veces se utilizan estos términos en la cultura popular, pero ten en cuenta que estas categorías son simplificaciones excesivas y no representan adecuadamente la complejidad de la identidad masculina.
- Hombres Alfa: En esta ideología, los hombres «alfa» se asocian comúnmente con cualidades como la confianza, la liderazgo, la agresividad, la competitividad y la capacidad de tener éxito en la vida y las relaciones. Se espera que los hombres alfa sean dominantes en situaciones sociales y tengan una alta autoestima. Sin embargo, esta descripción es muy estereotipada y no refleja la diversidad de personalidades y comportamientos de los hombres en la vida real.Ejemplo (ficticio): Un personaje de película que es un exitoso empresario, seguro de sí mismo y a menudo lidera a su grupo de amigos en actividades sociales.
- Hombres Beta: Los hombres «beta» suelen ser percibidos como menos dominantes y seguros que los hombres alfa. Se les asocia a menudo con cualidades como la sensibilidad, la empatía y la sumisión. En esta ideología, los hombres beta pueden ser vistos como más orientados a las relaciones y menos interesados en la competencia social.Ejemplo (ficticio): Un personaje de película que trabaja como consejero y se preocupa profundamente por el bienestar emocional de los demás, pero tiende a ser menos asertivo en situaciones sociales.
- Hombres Gama: El término «hombres gama» a veces se utiliza para describir a hombres que no encajan claramente en las categorías alfa o beta. Se les ve como individuos más equilibrados que pueden alternar entre comportamientos alfa y beta según las circunstancias pero que no se destacan en ninguna de las dos categorías.Ejemplo (ficticio): Un personaje de película que puede ser querido en su trabajo y tener algún puesto de poder pero también muestra sensibilidad y empatía en sus relaciones personales, adaptándose a las necesidades de cada situación. Son menos comprometidos en perseguir sus metas y un poco dispersos. Jack Sparrow es por ejemplo un personaje Alfa re-formulado para parecer un Gama
Es importante destacar que esta clasificación es una simplificación excesiva y no refleja la complejidad de la identidad masculina ni la variedad de personalidades y comportamientos que pueden tener los hombres en la vida real. La idea de categorizar a los hombres de esta manera ha sido criticada por perpetuar estereotipos perjudiciales y no se basa en la psicología o la sociología científica. Cada individuo es único y no puede ser reducido a una etiqueta como «alfa,» «beta,» o «gamma.»